Un plan de parto es una manifestación de voluntad escrita, del ejercicio del derecho de cualquier individuo a consentir, o no consentir sobre las intervenciones médicas que se le propongan, durante el trabajo de parto, parto y días posteriores.
En Argentina, la Ley 26.529 de Derechos del Paciente (en su Relación con los Profesionales e Instituciones de la Salud. Sancionada: Octubre 21 de 2009) es aquella que nos ampara en cuanto a la elección de profesionales y tratamientos que debemos elegir y aceptar (o no).
"Ley 26.529
(...)ARTICULO 2º
b) Trato digno y respetuoso. El paciente tiene el derecho a que los agentes del sistema de salud intervinientes, le otorguen un trato digno, con respeto a sus convicciones personales y morales, principalmente las relacionadas con sus condiciones socioculturales, de género, de pudor y a su intimidad, cualquiera sea el padecimiento que presente, y se haga extensivo a los familiares o acompañantes;
(...)
e) Autonomía de la Voluntad. El paciente tiene derecho a aceptar o rechazar determinadas terapias o procedimientos médicos o biológicos, con o sin expresión de causa, como así también a revocar posteriormente su manifestación de la voluntad. Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a intervenir en los términos de la Ley Nº 26.061 a los fines de la toma de decisión sobre terapias o procedimientos médicos o biológicos que involucren su vida o salud;
(...)Capítulo III
DEL CONSENTIMIENTO INFORMADO
ARTICULO 5º — Definición. Entiéndese por consentimiento informado, la declaración de voluntad suficiente efectuada por el paciente, o por sus representantes legales en su caso, emitida luego de recibir, por parte del profesional interviniente, información clara, precisa y adecuada con respecto a:
a) Su estado de salud;
b) El procedimiento propuesto, con especificación de los objetivos perseguidos;
c) Los beneficios esperados del procedimiento;
d) Los riesgos, molestias y efectos adversos previsibles;
e) La especificación de los procedimientos alternativos y sus riesgos, beneficios y perjuicios en relación con el procedimiento propuesto;
f) Las consecuencias previsibles de la no realización del procedimiento propuesto o de los alternativos especificados..."
e) Autonomía de la Voluntad. El paciente tiene derecho a aceptar o rechazar determinadas terapias o procedimientos médicos o biológicos, con o sin expresión de causa, como así también a revocar posteriormente su manifestación de la voluntad. Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a intervenir en los términos de la Ley Nº 26.061 a los fines de la toma de decisión sobre terapias o procedimientos médicos o biológicos que involucren su vida o salud;
(...)Capítulo III
DEL CONSENTIMIENTO INFORMADO
ARTICULO 5º — Definición. Entiéndese por consentimiento informado, la declaración de voluntad suficiente efectuada por el paciente, o por sus representantes legales en su caso, emitida luego de recibir, por parte del profesional interviniente, información clara, precisa y adecuada con respecto a:
a) Su estado de salud;
b) El procedimiento propuesto, con especificación de los objetivos perseguidos;
c) Los beneficios esperados del procedimiento;
d) Los riesgos, molestias y efectos adversos previsibles;
e) La especificación de los procedimientos alternativos y sus riesgos, beneficios y perjuicios en relación con el procedimiento propuesto;
f) Las consecuencias previsibles de la no realización del procedimiento propuesto o de los alternativos especificados..."
En el parto es la mujer quien determina el propio bien, tanto de la madre como del hijo, y para ello debe disponer de información y actuar con libertad.
La mujer que va a parir debe hablar con la persona que la va a acompañar en el nacimiento, mientras elabora su plan de parto. Es una buena idea armar el plan de parto en conjunto con el compañer@.
También es importante charlarlo con el obstetra. Ya que si hay demasiadas negativas, puede ser un indicio de que esa persona o institución no serán muy permeables a la hora del parto y probablemente sea indicio también de cambiar de profesional. A su vez, los profesionales pueden guiar en las distintas opciones que existen para que sus preferencias se cumplan.
También es importante charlarlo con el obstetra. Ya que si hay demasiadas negativas, puede ser un indicio de que esa persona o institución no serán muy permeables a la hora del parto y probablemente sea indicio también de cambiar de profesional. A su vez, los profesionales pueden guiar en las distintas opciones que existen para que sus preferencias se cumplan.
El plan de parto es el documento donde queda reflejado el tipo de asistencia que la mujer desea para su parto, y según las disposiciones legales, ha de respetarse siempre que no se produzca una situación de extrema urgencia.
¿Qué contiene?
Es preferible que sea presentado ante las autoridades de la institución, donde la mujer decide parir, con anterioridad al parto. Y por lo general se piden tres copias: Una para el director de la institución, una para el obstetra que esté siguiendo su embarazo y otra para el Jefe de neonatología.
Esto se recomienda hacer así, porque el plan de parto consta de distintas partes:
1. La primera contiene todos los datos de la mujer y la información de su cobertura médica en caso de que la tenga, También se pueden incluir los datos del padre si es que se quiere que esté presente en todo momento.
2. Luego se empiezan a dictaminar las preferencias de la mujer durante el trabajo de parto. Es importante destacar que se desea estar informada sobre la evolución del parto y que se le haga partícipe de las decisiones sobre el mismo. Dentro de este punto hay varias cosas a tener en cuenta:
- La presencia de otras personas. Recordemos que la ley nos ampara, la Ley 25.929 de Derecho en el Nacimiento, dice que podemos estar acompañadas por la persona de nuestra preferencia. Entonces, en el plan de parto, no sólo podemos aclarar que queremos estar acompañadas, sino también avisar, que no queremos médicos que no sean del equipo o que no conozcamos, y que se solicita que se nos avise en caso de ser necesario que ingresen a la sala de parto.
- Las preferencias relacionadas con los procedimientos. En este punto hay muchas opciones y eso a veces juega en contra. Particularmente recomiendo que se investiguen los pro y los contra de cada intervención. Que pregunten a sus madres, a sus abuelas, a sus tías, a sus hermanas, o toda mujer que haya parido, qué no dejarías que te vuelvan a hacer en tu parto, y escucharlas, Podemos elegir la posición, si queremos deambular, si queremos comer o tomar líquido, si queremos vías, si queremos tactos, si queremos oxitocina, amniotomía, peridural, si querés que se controle al bebé y cómo, Todas estas cosas hay que charlarlas con el obstetra con anterioridad, hay veces que los lugares están mucho más preparados y hasta podemos elegir llevar pelota, vestir tus ropas y escuchar la música que lleves, por eso es también importante que puedas ver la sala de parto o de preparto, para que puedas interiorizarte en ese lugar que luego va a ser tan íntimo.
3. Preferencias relacionadas con la atención al recién nacido. Nuevamente recomiendo que se averigüen una por una las prácticas de rutina de la institución y las consecuencias que pueden llegar a tener. Dentro de esto entran: Que no lo aspiren las mucosidades, que no le introduzcan sondas rectales, que se respete el contacto piel con piel, poder darle el pecho en la misma sala de partos. que no se los separe, que no le den leche de fórmula, que se priorice la lactancia materna (para ello es una opción buscar maternidades u hospitales que sean Amigos de la Madre y el Niño). La decisión personal de cada familia sobre la administración de nitrato de plata en los ojos, la vitamina k y las vacunas. Que no se le corte el cordón umbilical hasta que deje de latir.
4. Preferencias durante la estancia en el hospital. Que sea lo más breve posible, tener al bebé todo el tiempo con la madre, poder solicitar alta voluntaria.
5. Otras preferencias:
- Dar a luz en un ambiente tranquilo e intimo (luz tenue, silencio, pocos espectadores...).
- Esperar a notar ganas para empezar a pujar.
- Ponerme en la posición en que mejor me encuentre para pujar (cuclillas, de pie, acostada en la cama, en la camilla obstétrica...).
- Que no me dirijan los pujos, prefiero pujar de forma espontánea.
- Poder beber agua si no hay riesgo evidente de intervención quirúrgica.
- Disponer de un espejo para poder ver cómo nace mi bebé.
- Poder tocar la cabeza del bebé cuando esté a punto de salir.
- Poder sacar al bebe con mis manos en la medida de lo posible.
- Que no se me haga una episiotomía.
- La donación de la sangre del cordón.
- Que me sea entregada la placenta.
- Ponerme en la posición en que mejor me encuentre para pujar (cuclillas, de pie, acostada en la cama, en la camilla obstétrica...).
- Que no me dirijan los pujos, prefiero pujar de forma espontánea.
- Poder beber agua si no hay riesgo evidente de intervención quirúrgica.
- Disponer de un espejo para poder ver cómo nace mi bebé.
- Poder tocar la cabeza del bebé cuando esté a punto de salir.
- Poder sacar al bebe con mis manos en la medida de lo posible.
- Que no se me haga una episiotomía.
- La donación de la sangre del cordón.
- Que me sea entregada la placenta.
Hay parteros que ya tienen armado un plan de parto y de hecho, también hay instituciones que tienen un modelo de plan. Hoy se pueden conseguir varios modelos, y también podés hacer el tuyo personalizado.
Hoy, las doulas podemos ayudarte en la elaboración del plan de parto y acompañarte en la decisión de algunas prácticas, buscando información que necesites para decidir.
Espero este artículo te haya servido. Lo armé en base a varias páginas que estuve viendo y adaptando la información a la actualidad de la República Argentina.
Cualquier duda podemos hacer una consulta.
Edda.
Espero este artículo te haya servido. Lo armé en base a varias páginas que estuve viendo y adaptando la información a la actualidad de la República Argentina.
Cualquier duda podemos hacer una consulta.
Edda.
.•.¸¸•´¯`•.¸¸.ஐ Somos Mamíferas ஐ..•.¸¸•´¯`•.¸¸.
No hay comentarios:
Publicar un comentario